Esta tecnología lleva ya varios años en desarrollo e implementación, pero aún y así es muy poco conocida ya que apenas comienza a usarse. La llegada de la eSIM de forma generalizada está tardando más de los que nos gustaría; a pesar de que ya varias operadoras en diferentes países del mundo ofrecen la posibilidad. También poco a poco cada vez más dispositivos se hacen compatibles con ella, lo que confirma la intención de avanzar en esa dirección.
Una apuesta que resulta verdaderamente interesante si tenemos en cuenta todas las facilidades que esta nos proporciona frente a una SIM normal. Tanto para las operadoras como para los usuarios las ventajas son múltiples, de ahí que varias compañías estén enfocadas en adoptar esta nueva modalidad. Pero mientras esperamos que se vaya globalizando sería conveniente conocer que es específicamente una eSIM y precisamente que nuevas mejoras trae consigo.
Que es una eSIM
Ya todos sabemos lo que es una tarjeta SIM(subscriber identity module), pues la eSIM viene siendo lo mismo pero virtualmente. Es decir, si hasta ahora necesitábamos esas tarjetas físicas para poder acceder a los diferentes servicios telefónicos, ahora los móviles y otros dispositivos comienzan a integrar ese chip (electronic SIM). Las tarjetas SIM almacenan de forma segura la clave de servicio del suscriptor usada para identificarse ante la red, con las eSIM esa información se descarga hacia el dispositivo.
Algunas de sus ventajas
Como hemos venido explicando hasta ahora no es nada raro que desde hace tiempo se esté tratando de impulsar esta tecnología. La eSIM presenta una serie de ventajas claras para todos los bandos con respecto a sus antecesoras entre las que destacan:
- Tamaño reducido: Posee unas dimensiones de 6×5 mm, con un grosor de 0,6mm y por supuesto está integrada en la placa del dispositivo. El ahorro de espacio es considerable, dejando lugar a otros componentes especialmente en dispositivos pequeños como relojes y otros Wearables.
- Asociar el número a varios dispositivos: Esta capacidad multidispositivo de la eSIM es verdaderamente útil no solo para poder recibir las mismas llamadas en todos los dispositivos; sino también porque así mantenemos una tarifa única y se reducirían los gastos.
- Facilita la portabilidad: El no tener que comprar una tarjeta física ni esperar por ella permite mayor agilidad en la tramitación del servicio; especialmente cuando necesitemos o queramos cambiarnos de compañía (algún día). Todo esto por lo menos en teoría ya que también sería posible asociar la tarjeta eSIM a más de un operador en varios países.
- Permite mejores diseños: El ahorro de espacio no solo es conveniente para añadir más batería por ejemplo, sino que también se podrían conseguir diseños más futuristas y funcionales. Un teléfono sin ranuras para bandejas por ejemplo, además de ser más elegante, sería más seguro y estaría mejor protegido contra el agua.