Imagínese vivir con el miedo constante a las inundaciones, sin ningún lugar a quien acudir para recibir advertencias confiables. Para casi 1.500 millones de personas en todo el mundo, este no es un escenario hipotético: es una dura realidad. Las inundaciones, el desastre natural más común, dejan un rastro de devastación, desplazan a comunidades y cuestan miles de millones en daños cada año.
Google comenzó con un proyecto piloto en Patna, India
Tradicionalmente, la previsión precisa de inundaciones era un lujo limitado a zonas con una amplia infraestructura de seguimiento. Esto dejó a las naciones en desarrollo y a las comunidades desatendidas particularmente vulnerables. Pero Google está cambiando las reglas del juego con el poder de la Inteligencia Artificial (IA).
El viaje de Google comenzó con un proyecto piloto en la región india de Patna, propensa a inundaciones. Aquí, construyeron modelos de predicción de inundaciones utilizando datos en tiempo real e información histórica. Si bien este enfoque ofrecía una precisión hiperlocal, no era escalable. Se dieron cuenta de que la respuesta estaba en la capacidad del aprendizaje automático para procesar grandes conjuntos de datos.
En 2019, Google había multiplicado por 12 su alcance y envió alertas de inundaciones vitales a las comunidades afectadas. Al reconocer el potencial de las redes de memoria a largo plazo (LSTM) en IA, se asociaron con investigadores para desarrollar una plataforma global de predicción de inundaciones. Este ambicioso proyecto tenía como objetivo entregar información confiable incluso en regiones con escasez de datos.
El éxito inicial en India y Bangladesh abarcó a 360 millones de personas, pero las limitaciones de los datos locales obstaculizaron una mayor expansión. ¿La solución de Google? Un modelo global de IA entrenado en vastos conjuntos de datos, que permite la predicción de inundaciones incluso sin mediciones locales del caudal de los ríos.
Esta innovación condujo al lanzamiento de la plataforma Flood Hub en 2022. Hoy en día, proporciona pronósticos de inundaciones en tiempo real a más de 460 millones de personas en 80 países, incluidas regiones de África que anteriormente estaban desatendidas. Ahora, el acceso a la previsión de inundaciones en África rivaliza con el de Europa .
Google entiende que el progreso científico prospera gracias a la colaboración. Se asocian activamente con instituciones académicas, gobiernos locales y organizaciones internacionales como la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para apoyar los sistemas de alerta temprana. Además, iniciativas como el “Proyecto Caravana” se centran en estandarizar y agregar conjuntos de datos sobre inundaciones existentes. La empresa parece estar comprometida con investigaciones y tecnologías más nuevas para ampliar la cobertura, abordar nuevos tipos de inundaciones, como las repentinas, y explorar soluciones de inteligencia artificial para desafíos más amplios de adaptación al clima. Este es un viaje continuo, cuyo objetivo final es proteger a las comunidades vulnerables en todo el mundo. Es uno de los ejemplos dispersos en los que las grandes empresas tecnológicas están utilizando la IA para realizar un cambio, y es bueno verlo.